De todas las variantes que hemos probado hasta ahora de la ruta del agua, y ya van unas cuantas, esta es la que más nos gusta. Las subidas por pista son fáciles, y tiene unos tramos de bajada bastante técnicos y bonitos. El regreso desde el embalse de Eiras es de lo mejor del recorrido, desde el pueblo e Alen se coge una pista en bajada que va a encontrarse nuevamente con la senda del agua unos kilómetros después. Es recomendable realizarla en tiempo seco y con poca agua. En invierno o después de algunos días de lluvia, hay tramos casi impracticables.
Después del Verano y parte de Otoño tan seco que llevamos, creímos que era un buen momento para realizar esta ruta. Así que decidimos emprenderla desde Los Valos. Salimos del cruce de la carretera nacional 550 que une Redondela y Porriño con el desvío a Mos por un lado y a Amoedo y Pazos de Borbén por el otro.
El día estaba con una temperatura ideal para dar pedales. A unos 6 kilómetros de la salida comienza una larga pero fácil subida de unos 3 kilómetros hasta Amoedo, un poco antes en el alto, una parada para realizar unas fotos con las magníficas vistas de la ría de Vigo al fondo, adornada con la Isla de San Simón y el puente de Rande. Cruzamos la carretera PO-250 y por detrás del pueblo realizamos una bajada bastante técnica y con algún tramo algo complicado hasta volver a coger la senda del agua, y ya no la abandonamos hasta llegar al embalse.
Cuando llegamos quedamos impresionados, porque es la primera vez que vemos la salida del embalse cerrada y sin agua en su cauce. La sequía está haciéndose notar. Nos paramos bastante rato a realizar fotos ya que es una ocasión única. Después subimos a la parte alta del embalse y nos volvimos a parar para fotografiar el embalse y tomar unas barritas energéticas.
La vuelta la realizamos por un tramo de carretera hasta el pueblo cercano de Alén, y desde allí cogimos una pista empedrada pero en buen estado que va descendiendo hasta confluir de nuevo con la ruta del agua. Desde allí el pedaleo es fácil, hasta llegar a la subida que sale a la carretera que va de Pazos al pueblo de la Hermida, que es bastante dura, aunque no es muy larga. Hay que decir que no se puede volver por el sendero que bajamos en la ida, a no ser que queramos subir con la bici al hombro.
Seguimos por la carretera hasta llegar a Pazos, desde ahí hasta Amoedo por carretera y aquí volvemos a coger la pista que ya no dejaremos hasta llegar al punto de partida.
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