El día amaneció algo cubierto de nubes, cargamos las bicis y marchamos rumbo a Cangas donde nos esperaban Chema, Carlos, Manuel y Juan para enseñarnos una ruta que prometía una buena mañana de enduro hasta Cabo Couso.
La ruta no tiene una excesiva dificultad, salvo un par de subidas duras y técnicas, y la subida del camino romano hacía el Facho, en la que la mayoría tuvimos que echar pie al suelo.
El recorrido tiene tramos de gran belleza paisajística, con bonitos senderos cerca de la costa y otros por el interior. El único “pero” que se le puede poner a la ruta, es que el monte se encontraba en zonas muy sucio, con muchas ramas, palos y hojas, lo que hacía que la bici patinase más de la cuenta y con el riesgo de que algún palo provocase alguna avería como finalmente ocurrió.
Al retorno y en una bajada muy rápida desde Hio a Limens un palo se atravesó en el cambio trasero de mi bicicleta, rompiendo la patilla que sujeta el cambio y dejando la cadena completamente clavada entre los piñones y la rueda.
Con esta avería estuvimos parados casi media hora hasta lograr montar el cambio de nuevo (menos mal que llevaba una patilla de cambio de repuesto), lo que sumado a las diversas paradas que realizamos, contabilizó 1h10’ parados y 3h rodando.
Al final llegamos a Cangas casi a las 2 del mediodía, pero contentos por la bonita ruta realizada. Habrá que volver a repetirla “puliendo” mejor algún tramo.
Desde aquí un saludo y las gracias a nuestros amigos del morrazo.
1 comentario:
Genial. Como siempre, genial. Un millón de gracias.
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